Algunas disciplinas no solo nos ayudan a mantenernos en forma sino también a encontrar un equilibrio interno. El Chi Kung, conocido como “la gimnasia de la eterna juventud”, es una de ellas. Literalmente, Chi Kung o Qi Gong significa "ejercitarse con la energía" y es una técnica corporal de origen chino de hace más de 5000 años, que toma la forma de una gimnasia suave. Los ejercicios se encadenan mediante movimientos lentos, flexibles, redondeados, armónicos, sincronizando la respiración, la concentración y el movimiento. El Chi Kung se funda en movimientos sin esfuerzo muscular, sin aceleración cardíaca, y produce menor consumo de oxígeno. Ésto, sumado al estímulo de la circulación de la energía (mejorando distribución, asimilación y producción), además de fomentar la regeneración celular, retrasa el desgaste del organismo y su envejecimiento. Susana Martin, profesora de Chi Kung, entre otras disciplinas, nos cuenta exactamente de qué se trata.
¿Qué es el "Chi" o "Qi"?
Es lo que podría traducirse clásicamente como "energía" o "energía vital" y circula por los canales o "meridianos de acupuntura". La energía circula por todas partes, hasta en la más pequeña célula. Cuando la energía vital circula perfectamente por todo el organismo se está en un estado de serenidad activa y se goza de buena salud. Cuando la circulación del "Qi" está obstruida o es deficiente se es vulnerable a las enfermedades y a los desequilibrios.
¿En qué se diferencia el Chi Kung del Tai Chi Chuan?
El Tai Chi Chuan es un arte marcial nacido también en China, en el siglo XIII, al menos 2000 años más tarde que el Qi Gong. Utiliza los mismos principios de los movimientos lentos y fluidos de energía que el Qi Gong, para hacer circular la energía y mantener la salud. Pero el Chi Kung además tiene ejercicios dirigidos a equilibrar la energía de un órgano o función del organismo, ejercicios que operan sobre una determinada emoción o sobre un meridiano en concreto, por ejemplo.
¿Cuáles son sus beneficios a nivel físico?
El Chi Kung refuerza y tonifica el cuerpo, mantiene en forma al corazón, favorece la flexibilidad, la concentración, la coordinación y el equilibrio. Esta gimnasia milenaria, llamada "gimnasia de la salud y la longevidad", es el arte que los sabios, los médicos y monjes taoístas crearon para captar la energía de la naturaleza y así reforzar la energía vital y facilitar su circulación por todo el cuerpo, a fin de que los órganos y todos los tejidos se nutran mejor. Se logra un aumento de la resistencia física y se reduce la velocidad del proceso de envejecimiento.
¿Y a nivel mental/ espiritual?
Al fomentar mayor concentración, calma la mente. El objeto de concentración es el cuerpo mismo en movimiento. Ayuda a estar presente, aquí y ahora, generando equilibrio emocional y mayor conciencia de sí mismo. Se trabaja con la energía de los elementos: agua, tierra, fuego, madera y metal en contacto con la naturaleza, lo que favorece la espiritualidad. A causa de su acción directa sobre la energía del cuerpo y su circulación, el Qi Gong provoca transformaciones interiores sobre nuestro psiquismo y nuestras emociones, y ayuda a protegernos de los efectos del estrés.
¿En qué consiste una clase?
Existen muchos tipos de clases, y se obtienen distintos efectos según las posturas, la respiración, la concentración, la posición (de pie o sentado), el ritmo del movimiento (inmóvil, ondulaciones, desplazamientos, etc.). También se integran a la clase el desbloqueo de articulaciones y automasajes. Se pueden realizar clases para hacer circular la energía por todo el cuerpo a fin de alentar la regeneración de los tejidos (huesos, vasos, órganos, músculos, glándulas, etc.), y otras clases se pueden orientar a activar meridianos de energía y sus órganos con un fin terapéutico.
¿Cuánto influye la respiración?
La respiración debe ser natural, hay que abandonarse a su ritmo. La respiración armoniosa abarca también el abdomen, que se dilata al inhalar y se contrae al exhalar el aire. Salvo indicación especial, se respira por la nariz silenciosamente. Cuando se realizan los ejercicios, al ser lentos, la respiración se mantiene tranquila, y se va haciendo más profunda, porque se desarrolla con más lentitud.
La eficacia de la respiración se potencia cuando se sincroniza con los movimientos: al exhalar el cuerpo se repliega y se flexionan los miembros; al inhalar se extienden los miembros y se yergue el cuerpo. La sensación es la de estar "respirando a través de todo el cuerpo".
¿Y la mente qué lugar ocupa?
La función de la mente es fundamental, ya que, según los chinos, "donde va el pensamiento va la energía", por eso en Chi Kung es tan importante la concentración y los ejercicios de visualización (de los meridianos, de común-unión con la naturaleza, etc.).
¿Cómo debe ser el lugar donde se practique?
Es conveniente practicar en un ambiente sereno, silencioso e intentando no ser sorprendido por ruidos súbitos (teléfono, timbre, etc.). Si se practica en el interior, la habitación debe estar bien aireada, pero sin corrientes de aire. Al aire libre, es excelente con buen tiempo, pero el sol no debe ser demasiado caliente, ni practicar si hay mucho viento, lluvia o niebla.
Un ejercicio: "El pájaro que vuela conscientemente"
1. De pie, la separación de los pies equivalente al ancho de los hombros, los párpados entornados e instalamos la distensión.
2. Inhalamos al tiempo que separamos los brazos y los elevamos hasta ponerlos en cruz a la altura de los hombros, para replegarlos enseguida y acercar el dorso de las manos a los hombros (como si plegáramos las alas).
3. A continuación separamos los brazos exhalando el aire (desplegamos las alas) y, al mismo tiempo, doblamos ligeramente las rodillas.
4. La respiración permanecerá tranquila, lenta, marcando el ritmo de los movimientos, y luego instalamos la concentración tanto durante la inspiración como en la espiración.
5. La concentración se dirigirá hacia las palmas de las manos, las puntas de los dedos y el pecho.
6. Practicar de esta manera durante al menos 3 minutos, atentos y distendidos, el espíritu alerta y en observación.
Algunos datos más
• El Chi Kung está contraindicado en casos de fiebre, enfermedades en estado agudo, o hemorragias importantes, y cuando la mente está muy agitada o encolerizada.
• Los niños pueden practicarlo, sobre todo la técnica de los 5 animales (según la personalidad del niño, se trabaja con ciertos animales y ejercicios). En cuanto a las embarazadas, no es recomendable, ya que se trabaja de pie y la embarazada tiene su centro de gravedad cambiado. Además, se trabaja mucho con la "respiración invertida" (presiona el abdomen/útero), y tampoco es indicado.
• Las clases pueden ser grupales o individuales. Una vez que el alumno aprende los ejercicios que necesita los puede practicar solo todos los días y concurrir a las clases para hacer correcciones y profundizar más.
• Lo importante es tener una práctica regular. Para conservar el cuerpo elástico y saludable, ralentizando el envejecimiento, es recomendable practicar 30 minutos por día o 1 hora u hora y media, entre dos y tres veces por semana. Esto es relativo a la motivación, a los objetivos que tenga el practicante y su estado de salud.
• La mejor hora para practicar Chi Kung es por la mañana, al levantarse, cuando la energía Yang se eleva y cuando las actividades del día aún no han capturado nuestros pensamientos. Si es posible, lejos de las comidas (al menos 1 o 2 horas). Por la noche, practicar una hora antes de acostarse, ya que el aporte de energía puede impedir dormir.
Consejos generales para principiantes
• Practicar con regularidad (es decir, todos los días).
• No desalentarse si al principio cuesta coordinar los movimientos. Las repeticiones harán que la mente se acostumbre a concentrarse, aquietándose.
• Se pueden tomar los ejercicios o clases como un "ritual" de re-conexión con las energías de la naturaleza, con el propio interior, descubriendo nuevas sensaciones de plenitud y calma.